Historias Cotidianas que no le interesan a nadie



Capítulo Cuarto

Esa palabra…

De vez en cuando me rodea por la cabeza una palabra cualquiera que no se bien si yo me la he inventado o simplemente no sé su significado, casi siempre es algo inventado.

Palimpsesto, estuvo dándome vueltas por algunos días hasta que me decidí a consultar en el diccionario, nada…, no existía, al menos en ese diccionario, así que consulté en el de la real academia de la lengua española, pero tampoco…, deduje que no era una palabra castiza, pero me quedaba otra opción para investigar, una inmensa fuente, el Internet, si esa palabra existe tendría que aparecer en la Web, decidido a salir de mi ignorancia, tipié dicha palabra y, como lo imaginé, ahí estaba, 178.000 coincidencias, hice clic en una opción al azar y se despliega una página llena de simbologías que me recuerdan a panfletos neo-nazis, el momento que reviso el significado que ahora pierde su importancia mi mirada rápidamente es atraída por una crítica a la película Hellboy dirigida por el mexicano Guillermo del Toro, el texto criticaba duramente el filme ambientado en la segunda guerra mundial, sobre todo la escena que los nazis abren una especie de portal, para invocar, al mismísimo demonio, el rabioso autor del texto luego de calificar con duros términos al director, explicaba que el nacional socialismo no tuvo nada que ver con el satanismo, ¿cómo si eso importara?, el confundido autor de tal atrevido texto, quería enseñarnos que el nacional socialismo abreviado como n.s. nunca fue bien entendido y que ese, había sido su punto débil, para mi mala suerte, la curiosidad me obliga a seguir indagando sobre el tema, asombrado me doy cuenta que la estupidez ganaba terreno, encontré una página tras otra y una más agresiva que la anterior, en ese momento recordé que alguien me contó de un grupo skin-head ecuatoriano, ya no tan asombrado, lo encontré, tenia una pila de barbaridades que intentaban ser tolerantes, qué es esto, racismo en el Ecuador?, suena a chiste, entendí el dicho aquel
“la ignorancia es atrevida”.

Visitando un amigo que tiene una columna de opinión en un medio escrito. Hablando de asuntos varios, salta a la palestra el tema del fascismo y la derecha ecuatoriana, supongo que se debía al ambiente electorero que vivíamos, entre chiste y susto me enseña un mail que le había enviado alguien que provenía del puerto principal, ciudad donde la derecha del país ha construido su cuartel general, ¿quién sabe porqué?, es una urbe, en que la mayoría de la población carece de los servicios básicos como agua potable o alcantarillado, pero es la ciudad mejor maquillada del mundo, estúpida visión hong-konesca de sus dirigentes… El mail al que me refería, iniciaba, llamando vago intelectual a mi amigo y a todos los intelectuales sobre todo los que viven en la capital, le pedía no muy cortésmente, al mejor estilo de Jorge Ortíz, que se deje de escribir de su metrópoli y que se largue a su inmunda ciudad contaminada, según el autor de tal amenazador mail, la polución de la capital se debía a las administraciones de izquierda, que tal…?, ahora resulta que el humo que producen los vehículos tiene tendencias políticas.

¿No se qué pasa, dónde estuve todo este tiempo?, en una población si bien es cierto mayoritariamente mestiza, pero estamos hablando de un mestizaje con un 70% indio, 5% árabe, 5% afro, 5% come pizzas, 5% hijo del lechero y, un 10% mezcla de español mezclado, ¿cómo se pueden conformar grupos racistas?, que despiste de estos tipos. También recordé una conversación con algún alumno mío (aunque me da vergüenza admitirlo) que me confesaba orgullosamente que él es racista, “pero sólo con los negros”, ¿qué?, no lo podía creer, no sabía si sentir pena por el pobre chico o caerle a patadas.




¿A quién culpamos de esto…, a los padres?, que toman a la ligera la concepción de un hijo simulando alegría por la “buena nueva”, pero nunca están preparados para tamaña responsabilidad, a parte de tener la cabeza llena de convencionalismos sociales ridículos, formando a sus retoños llenos de complejos raciales, sexuales y sociales, o a los centros educativos, mediocres desde sus bases, con “maestros”, que a duras penas repiten año tras año lo que creen que deben enseñar (mal enseñado y peor aprendido), pero no pueden formular una opinión inteligente sobre nada, a quién…?, en que parte de la historia empezamos a enloquecer?. ¿Y qué es la derecha, la izquierda, el centro, arriba, abajo…?, o las ideas de igualdad, desarrollo, progreso, el deseo de tener más dinero, etc., no existen sin pertenecer a tal o cual tendencia política, “al diablo…”, por mí, que se saquen los ojos, tanto capitalinos como porteños son lo mismo, cada quien cumple su trabajo, nada más, “altos y enanos visten con la misma piel”, -políticos, dirigentes sociales, arengadores, muchas gracias por nada, pueden irse a su casa - la peor forma de limitar el pensamiento es defender a raja tabla cualquier bandera, ¿qué…, no está claro?, o tal vez al ciudadano de a pie le interesa muy poco estos conceptos, ¿será ese el problema?.

Personalmente me declaro políticamente en la nada, tal vez inaugure mi propio partido, el PNE, Partido Nadaista Ecuatoriano, pueda que gane algún puestito, quién sabe?, lo que si sé, que lo mío no es apatía ni “que me importismo”, solo es hastío y angustia .


Ilustración: John Heartfiel, The Cross Wasn't Heavy (Dadaísmo Alemán)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me gustó mucho lo que leí, el tema y la forma en que lo abordas. Me sentí identificada con muchas cosas que allí mencionas.